domingo, 1 de marzo de 2009

De nada sirve llorar, mejor fumar y esperar.

No, ayer no. Aguanté todo el día mi llanto, fui feliz porque era mi cumpleaños y no quería estar mal y llegué incluso a pensar que por no haber llorado ya era una mujer más fuerte pero me equivoqué. Las lágrimas corren por mis mejillas y no puedo detenerlas, me siento débil y no sé que hacer. En este momento solo sé llorar, pienso y pienso y me doy cuenta que no puedo dejar de amarte. Sé que como una estúpida que soy voy a terminar perdonandóte porque me podés demasiado y sé que lo más probable es que después de perdonarte vuelvas a hacer algo mal y como consecuencia yo vuelva a llorar. No espero que seas perfecto, me enamoré de la persona que sos y lo que menos quiero es cambiarte pero a veces sería lindo que me demostrarás cuanto te importo.

No hay comentarios: