viernes, 31 de diciembre de 2010

Gracias a la vida que me ha dado tanto.

Increíble fue este año. Pasaron muchísimas cosas, me empecé a llevar bien con personas con las que creí que nunca en la vida me iba a llevar bien, personas que juzgue de antemano por el simple hecho de que se llevaban bien con personas desagradables para mí. Perdí personas que significaban mucho en mi vida pero supongo que si las perdí por algo es, yo creo en el destino y sé que todo pasa por una razón. Terminé el colegio, esa etapa hermosa de mi vida llamada secundario. Conocí gente que en muy poco tiempo se hicieron importantes para mí y que en muy poco tiempo desaparecieron de mi vida. Tuve muchísimos momentos de felicidad así como muchísimos momentos tristes y hoy 31 de diciembre de 2010 puedo decir que no me arrepiento absolutamente de nada. Increíble año, por muchos años más como este y mejores aún.

domingo, 26 de diciembre de 2010


































Estoy harta ya. Harta de extrañarte, de necesitarte, de ser capaz de dejar todo sólo por un abrazo tuyo, de engancharme SIEMPRE tan fácil. Ojalá pudiera cambiar, ojalá pudiera no apegarme a nada ni a nadie pero lamentablemente el 99% del tiempo me creo demasiadas expectativas de la gente y de las cosas. No pido mucho, lo único que quiero es verte una sola vez más y que me digas por qué te cansaste de mi, que me expliques por qué todo el mundo, tarde o temprano, se cansa de mi. SOLO QUISIERA UNA ÚLTIMA DESPEDIDA QUE MANCHE DE ALEGRÍA EL RESTO DE MI VIDA

viernes, 17 de diciembre de 2010

Y aunque sé que puedo estar sin vos. ¿Cómo hacer que quiera estar sin vos?

lunes, 13 de diciembre de 2010

Y tengo miedo a equivocarme, a sufrir, ser lastimada.

¿Y qué hacés cuando te das cuenta que todo el mundo tenía razón?¿Y qué hacés cuando entendés que lo inevitable está empezando a ocurrir pero sin embargo no tenés muchas ganas de admitirlo?¿Qué se hace en este tipo de situaciones? Ojalá la vida viniera con un manual de instrucciones así no nos equivocaríamos nunca o CASI nunca porque somos tan pero tan idiotas que nunca escuchamos lo que nos dicen los demás (y nunca leemos demasiado bien las instrucciones) y siempre hacemos lo que nosotros queremos sabiendo que en el fondo va a pasar lo que todo el mundo nos dijo. El dolor, la desilusión y el odio hacia uno mismo es inevitable. Cada día lográs sentir más que no servís para nada y mucho menos para que alguien se fije en vos, pero para que alguien se fije EN SERIO en vos. No entendés que es lo que hacés mal pero a veces (o la mayor parte del tiempo) te da la sensación de que sos incapaz de enamorar a alguien.

domingo, 12 de diciembre de 2010

Yo sólo quiero hacerte el amor 
e ir caminando un rato bajo el Sol.
Y de un momento a otro te diré
que tengo que dejarte otra vez
pero estaremos juntos hasta el amanecer.
Yo tomo el tren que sale a la hora 16.

viernes, 10 de diciembre de 2010

Todos tenemos un poco de miedo.

Básicamente de eso se trata la vida: de tener miedo. Miedo a crecer, a sufrir, a sentirnos desilusionados, a sentirnos devastados, a los insectos, a la oscuridad, a los fantasmas, a la soledad, al fracaso, a la muerte, al dolor. Pero esos son tan sólo algunos de los miles de miedos que cada persona posee. ¿Por qué no entendemos de una vez por todas que tenemos que arriesgarnos en la vida? Muchísimas veces podemos sentir miedo, o algo aún peor como es el pánico pero hay que enfrentar al miedo, dejarlo atrás y demostrarle que nosotros somos mejor que él, que a nosotros no nos va a vencer. Es así como escuché alguna vez en una canción: "Hay que morir al miedo para luego renacer."

viernes, 3 de diciembre de 2010

Quisiera pero NADA dura para siempre.

Es increíble que crecer cueste tanto. ¿Por qué nos aferramos a todo lo que sabemos que tiene fecha de vencimiento? El colegio es una de esas cosas a las que nos acostumbramos toda la vida, hasta que un día descubrimos que, así como todo lo demás, eso también tenía fecha de vencimiento. No sé bien que es lo que más me entristece de todo esto: quizás sea el hecho de que desperdiciamos unos cuantos años en hacer amigos y compartir cosas para que al fin y al cabo todos terminemos tomando caminos diferentes, o quizás tan sólo lo que más nos duele, lo que más nos molesta es que llegó la hora, LA HORA DE CRECER.